La Cuaresma: Un tiempo de penitencia y dolor
La Cuaresma tiene una duración de cuarenta días simbolizando entre otras cosas, el retiro de 40 días de Jesús en el desierto; los cuales comienzan el Miércoles de Ceniza y terminan con el Jueves santo antes de la Misa de la Cena del Señor. A lo largo de este tiempo, sobre todo en la liturgia del domingo, los fieles católicos están llamados a reforzar su fe mediante diversos actos de penitencia y reflexión.
La Cuaresma tiene cinco domingos , (en los que el fiel está obligado a asistir a misa), más el Domingo de Ramos, en cuyas lecturas los temas de la conversión, el pecado, la penitencia y el perdón, son dominantes.
El color litúrgico asociado a éste de este periodo es el morado que significa discreción, penitencia y dolor.